Mollete de Antequera
Mollete de Antequera
Delegado territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural.
Málaga es mucho más que sol y playa
La provincia de Málaga es mundialmente conocida por sus increíbles playas en las que es posible disfrutar del sol y del mar, olvidando el ritmo acelerado que llevamos a diario, y también nos ofrece rincones de montaña dignos de admiración, como el famoso Tajo de Ronda, un desfiladero declarado Monumento Natural de Andalucía ante el que es imposible permanecer indiferente.
Y esto son solo dos ejemplos de la amplia variedad cultural, ambiental y monumental que ofrece este territorio donde se puede confirmar que actualmente la tendencia turística pasa por la valorización de la cultura popular. Ya pasaron los tiempos en que los visitantes de nuestra tierra se limitaban a broncearse en la playa. Ahora, además de disfrutar de nuestro magnífico litoral, también buscan conocer más de cerca nuestras raíces, nuestra idiosincrasia… En definitiva, nuestra forma de vida.
Y aquí, la gastronomía tiene mucho que decir. Sentarse a la mesa en un restaurante malagueño es un deleite en todos los sentidos porque esta provincia ofrece a los amantes de la buena cocina todo aquello que puedan esperar: materia prima de la mejor calidad, elaboraciones de primera y vinos de excelencia para acompañar cada uno de los platos, desde los entrantes hasta el postre. Aceite de oliva virgen extra, chirimoyas o pasas son, por ejemplo, algunos de los ingredientes de excelencia que Málaga ofrece no sólo a los fogones de este territorio andaluz, sino a las cocinas de todo el mundo, ya que sus productos agroalimentarios pueden encontrarse en prácticamente cualquier despensa, gracias al carácter exportador que identifica a los andaluces en general, y a los malagueños en particular.
​El buen hacer de los agricultores, ganaderos, pescadores, bodegueros y demás empresarios del sector agroalimentario es fundamental para llevar al mercado unos alimentos que ofrecen todo el sabor y las peculiaridades de nuestro campo y nuestro mar. Productos que los grandes maestros de la cocina saben combinar con la elegancia y sabiduría para hacerles merecedores de galardones tan emblemáticos como las Estrellas Michelin que ostentan, nada más y nada menos, que seis restaurantes de la provincia. Ronda, Fuengirola, Málaga y Marbella acogen establecimientos que lucen estos distintivos.
Los cocineros malagueños, que conjugan en sus platos tradición e innovación, son hoy embajadores de Andalucía al más alto nivel. Tanto quienes se han quedado en nuestra tierra como los que han salido de ella para llevar a otros países la riqueza andaluza, nuestros chefs tienen un papel fundamental para que los habitantes de todo el mundo conozcan el inigualable patrimonio gastronómico de Andalucía, en el que Málaga tiene y tendrá un protagonismo indiscutible.
Espero que esta guía sirva de gran ayuda a quienes aún no tienen el placer de conocer los deliciosos platos y vinos que componen la cocina y la bodega malagueña y que, al mismo tiempo, les ayude también a conocer los hermosos rincones de esta provincia.
Málaga es sol y playa, por supuesto, pero también historia, naturaleza y recetas de la más alta calidad. Todo aquel que pasa por esta tierra vuelve a por más porque es imposible saciarse de la belleza que ofrece la tierra malagueña.
Carmen Crespo Díaz
Delegado territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural.
Quiero en primer lugar felicitar esta iniciativa de realizar una Guía web de Turismo Gastronómico de la provincia de Málaga, un excelente proyecto para acercar nuestros productos agroalimentarios y pesqueros y nuestra gastronomía a los turistas que nos visitan. Y hacerlo utilizando las nuevas tecnologías de la información y comunicación para adaptarnos a las circunstancias y a los tiempos.
Sin duda la gastronomía es una de las grandes fortalezas de Málaga, un elemento diferenciador que ofrecer al turismo y que en numerosas ocasiones imprime huella a quienes han disfrutado de la restauración de la provincia. Así contamos con platos de renombre como los espetos de sardinas, la porra antequerana, el ajoblanco, el choto al ajillo, los boquerones al limón y la fritura malagueña, las berenjenas con miel de caña, el gazpachuelo, el ajobacalao de Vélez-Málaga, las alcahofas acompañados de los vinos de las Denominaciones de Origen“Málaga”y“Sierras de Málaga”que trasladan una experiencia placentera sobre la base de la excelencia de nuestras tabernas, restaurantes y hostelería en general. Unos establecimientos donde podemos encontrar tradición y vanguardia, comida casera o galardones Estrella Michelín.
Y esta gastronomía sin duda hunde sus raíces en los productos de la tierra, unos alimentos que todo el sector se preocupa de poner en valor. Gracias a la labor de agricultores, ganaderos, pescadores, industria agroalimentaria y distribución tenemos a nuestra disposición unos productos de excelencia, que no nos han faltado ni siquiera en los momentos más difíciles de la pandemia por la Covid.
En Málaga contamos con varias Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas, unos sellos de calidad que mostramos orgullosos y que se traslada a nuestra gastronomía. Contamos con aceite de oliva virgen extra“Antequera”, nuestra aceituna“Aloreña de Málaga”, única Denominación de Origen en aceituna de mesa, la Denominación de Origen Pasas de Málaga y la reciente Indicación Geográfica Protegida“mollete de Antequera”. Con esta base planteamos una experiencia culinaria a quienes nos visitan, y que año tras año obtiene las mejores valoraciones.
En el caso de las pasas moscatel de la Axarquía, un producto muy ligado a la historia de Málaga, y tan singular que ha sido reconocido por la FAO, en 2018, como Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM).
La Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería y Pesca y la Junta de Andalucía, mantienen una apuesta decidida por el sector agroalimentario y pesquero malagueño, brindándole un apoyo integral desde la producción agrícola y ganadera hasta la promoción de sus productos de calidad, pasando por la modernización de las explotaciones y la innovación en la agroindustria, siempre con los objetivos de mantener a la población rural, producir de manera más sostenible y generar productos de calidad. Con todo este esfuerzo el sector agrario debe continuar siendo el pilar gastronómico sobre el que se sustente nuestra cocina, algo de lo que nos sentimos orgullosos y mostramos a los turistas como un auténtico tesoro.